El programa de marihuana medicinal de Florida es actualmente el mayor de Estados Unidos, con más de 900.000 pacientes registrados. Aunque una medida de 2024 para legalizar la marihuana de uso adulto en Florida no alcanzó el umbral de 60% necesario para su aprobación, recibió un considerable apoyo bipartidista. Mientras tanto, el programa médico ha seguido creciendo rápidamente.
Al comenzar la sesión legislativa de 2025, han surgido varios proyectos de ley de legisladores de todos los partidos. Esto indica un creciente interés bipartidista en mejorar el acceso y la asequibilidad para los pacientes inscritos en el programa de marihuana medicinal.
Entre la legislación propuesta se encuentran medidas para legalizar el cultivo doméstico para pacientes médicos y ofrecer protección a los empleados públicos que también son pacientes médicos. En particular, un amplio proyecto de ley, SB 552, presentado por el senador Joe Gruters (R-Sarasota), tiene por objeto eliminar muchas barreras que actualmente dificultan el acceso de los pacientes. Estas reformas podrían mejorar significativamente la vida de muchos floridanos que dependen de la marihuana medicinal.
El proyecto de ley SB 552 pretende reducir los costes para los pacientes y aliviar los problemas de transporte. Propone que los pacientes sólo tengan que renovar su registro cada dos años en lugar de anualmente. Además, el proyecto de ley permitiría a los médicos recomendar mayores cantidades de marihuana, reducir la frecuencia de las evaluaciones requeridas y permitir las visitas de telesalud con los médicos en lugar de exigir citas en persona.
Es importante destacar que el proyecto de ley también exime a los veteranos del pago de las tasas de registro y renovación, garantizando a estas personas el mejor acceso posible a los tratamientos, incluida la medicina basada en plantas.
A través de mi experiencia con Surterra en varias comunidades de Florida, he sido testigo de que las principales barreras para los pacientes que buscan tarjetas médicas son los altos costes y la dificultad para acceder al transporte para las certificaciones médicas necesarias en persona. Por lo tanto, reducir los costes y minimizar las visitas en persona son pasos cruciales.
La legislación propuesta también pretende ampliar la lista de afecciones que reúnen los requisitos para los pacientes de marihuana medicinal y permitir la reciprocidad. Esto permitiría a los pacientes de otros estados con programas de marihuana medicinal acceder a su medicina en los dispensarios de Florida. Estas medidas supondrían un gran alivio para los pacientes que viajan a Florida, que actualmente se enfrentan a dificultades para obtener su medicación.
Por ejemplo, un niño con epilepsia que depende de la marihuana medicinal para controlar los síntomas debería poder ir de vacaciones a Florida sin tener que preocuparse por el acceso a su medicación. En la actualidad, estas familias se arriesgan a cargos penales por viajar con su medicación o deben recurrir a productos de cáñamo con THC no regulados, lo que plantea dudas sobre su seguridad y calidad.
Me alienta ver que los legisladores de Florida reconocen la necesidad de soluciones políticas significativas que empoderen a los pacientes. Estas iniciativas pretenden ampliar el acceso, proteger a los pacientes en sus lugares de trabajo y concederles el derecho a cultivar sus propios medicamentos en casa, una medida que Surterra apoya desde hace tiempo.
La conclusión es que hacer que la marihuana medicinal sea más accesible y asequible mejorará la vida de los pacientes en toda Florida.
