El largamente esperado marco del cannabis medicinal en Francia por fin está tomando forma tras una campaña de cuatro años. El gobierno ha presentado tres documentos a la Unión Europea para su aprobación, lo que supone un paso importante en la legalización de un sistema regulado para el cannabis medicinal. Este anuncio llega tras un periodo tumultuoso en la política francesa, que retrasó muchas acciones legislativas, incluida ésta.
Hace apenas unas semanas, se dijo a miles de pacientes que participaban en el experimento del cannabis medicinal en Francia, que comenzó en 2021, que buscaran tratamientos alternativos. Sin embargo, las nuevas propuestas indican que ahora los pacientes podrán disponer de la flor de cannabis, pero solo en dosis de un solo uso y a través de dispositivos específicos.
El 19 de marzo de 2025 se enviaron a la UE los tres documentos que detallan el proceso de legalización. Estos decretos definen el marco para regular los medicamentos a base de cannabis. Su presentación estaba prevista para mediados de 2024, pero se retrasó debido a la caída del gobierno francés. Según el Sistema de Información sobre Reglamentos Técnicos (TRIS) de la UE, estos documentos incluyen detalles técnicos y normas esenciales, allanando el camino para lo que podría convertirse en uno de los mayores mercados europeos de cannabis medicinal.
Benjamin Alexandre-Jeanroy, CEO y cofundador de la consultora Augur Associates, con sede en París, mencionó que ahora están a la espera de que se completen los últimos trámites burocráticos. Señaló que el Gobierno firmará los decretos una vez que reciban la aprobación de la UE, lo que suele ser una formalidad durante las reuniones ministeriales semanales.
Con el nuevo marco, sólo los médicos formados y certificados podrán recetar cannabis medicinal. Los programas de formación se elaborarán en consulta con la Haute Autorité de Santé (HAS). El cannabis medicinal seguirá siendo un tratamiento de último recurso, que requerirá que los pacientes demuestren que no se han beneficiado de otras terapias estándar.
Se podrán recetar para afecciones específicas, como el dolor neuropático, la epilepsia resistente a los medicamentos, la espasticidad relacionada con la esclerosis múltiple y los efectos secundarios de la quimioterapia, así como en situaciones de cuidados paliativos. Aunque estas afecciones coinciden con propuestas anteriores, la inclusión de la flor de cannabis representa un cambio notable que puede atraer a más empresas al mercado.
Sin embargo, los pacientes no podrán fumar la flor por medios tradicionales, sino que deberán utilizar dispositivos certificados de vaporización de hierba seca. La flor también debe cumplir las estrictas normas de la monografía Ph. Eur. 3028 y presentarse como producto acabado. Además, el marco explorará otras formulaciones, incluidas opciones orales y sublinguales, en tres perfiles de proporción diferentes: THC dominante, equilibrado y CBD dominante.
Es importante destacar que el Ministerio de Sanidad ha confirmado que los 1.600 pacientes que participan actualmente en el experimento en curso sobre el cannabis medicinal seguirán teniendo acceso a su medicina al menos hasta el 31 de marzo de 2026. Para entonces, el gobierno espera que el marco integral esté plenamente operativo.