El cannabis ha pasado de ser un tema tabú a convertirse en una industria en auge, suscitando debates y reconfigurando las economías. Para quienes recuerdan cuando hablar de la marihuana estaba mal visto, la situación actual es notable. Este artículo explora la evolución del cannabis desde la era de la prohibición hasta su rentabilidad actual.
A finales del siglo XIX y principios del XX, el cannabis no estaba mal visto. Se incluía habitualmente en tinturas y medicamentos, conocidos por sus beneficios terapéuticos. Sin embargo, a medida que avanzaba el siglo XX, las actitudes sociales cambiantes empezaron a afectar a su percepción. La llegada de inmigrantes mexicanos tras la Revolución Mexicana introdujo el cannabis recreativo en la cultura estadounidense, pero la creciente xenofobia hizo que se asociara con la delincuencia y la desviación.
En la década de 1930, las actitudes habían cambiado radicalmente en contra del cannabis. La Oficina Federal de Estupefacientes, dirigida por Harry J. Anslinger, inició una enérgica campaña contra la marihuana. Historias y películas sensacionalistas, como "Reefer Madness", describían el cannabis como una sustancia peligrosa. Esto culminó en la Ley de Impuestos sobre la Marihuana de 1937, que criminalizó el cannabis en todo el país.
El movimiento contracultural de los años sesenta y setenta vio cómo el cannabis se convertía en un símbolo de rebeldía, pero la clase dirigente se resistía. La Ley de Sustancias Controladas de 1970 clasificó la marihuana como droga de la Lista I, afirmando que no tenía valor médico y colocándola junto a sustancias como la heroína y el LSD.
Un punto de inflexión importante se produjo en la década de 1990, cuando California aprobó la Proposición 215 en 1996, legalizando la marihuana medicinal. Esta decisión histórica reconoció los beneficios terapéuticos potenciales de la planta, especialmente para los pacientes con enfermedades crónicas. Otros estados tomaron nota y empezaron a reevaluar el papel del cannabis en la medicina y la sociedad, lo que condujo a un cambio gradual en la percepción pública.
El siglo XXI marcó un cambio drástico en la política sobre el cannabis. En 2012, Colorado y Washington fueron noticia por legalizar el consumo recreativo de marihuana, desafiando las leyes federales y animando a otros estados a reconsiderar sus propias posturas legales. Hoy en día, muchos estados han adoptado el cannabis recreativo, mostrando una evolución significativa en la opinión pública y la política en torno a esta planta una vez estigmatizada.