El inspector general de Massachusetts, Jeffrey Shapiro, ha informado de un importante fallo operativo en la Comisión de Control del Cannabis (CCC). Sus hallazgos indican que la CCC no recaudó más de $550.000 en tasas de licencias prorrateadas y potencialmente hasta $1,2 millones en tasas de licencias provisionales desde agosto de 2022 hasta agosto de 2024.
En una carta dirigida al Presidente en funciones de la Comisión, Bruce Stebbins, y al Director Ejecutivo, Travis Ahern, Shapiro subrayaba la necesidad de actuar. Reconoció que ni Stebbins ni Ahern desempeñaron funciones directivas durante el periodo de dos años en cuestión. Sin embargo, insistió en que, como líderes actuales, deben tomar medidas decisivas basadas en sus recomendaciones.
La investigación de Shapiro se inició tras recibir una queja en julio de 2024 sobre la incapacidad de la CCC para recaudar las tasas de licencia según lo dispuesto por la ley estatal. Sus hallazgos revelaron que el personal de la CCC no actuó conforme a una votación del 11 de agosto de 2022, que les ordenaba recaudar tasas prorrateadas en las prórrogas de licencias, lo que provocó una importante pérdida de ingresos.
El informe también destacaba que, durante casi dos años, la CCC no recaudó las tasas de más de 120 solicitantes de licencias provisionales, que podrían haber ascendido a $1,2 millones. Aunque no se detectó ningún fraude, Shapiro criticó a la comisión por sus deficientes prácticas empresariales y de supervisión.
Shapiro expresó preocupaciones adicionales en relación con la autoridad del personal de la CCC, señalando que concedían prórrogas de licencias sin la debida autorización. Cuando finalmente se concedió la autorización, el personal siguió sin cobrar las tasas prorrateadas asociadas.
Señaló problemas estructurales dentro de la CCC, afirmando que la ley estatal vigente crea ambigüedad en cuanto a las responsabilidades de liderazgo, concretamente entre el presidente de la comisión y su director ejecutivo. Se mostró optimista ante la posibilidad de que el nuevo director ejecutivo trabaje para mejorar las prácticas operativas, pero advirtió de que la falta de claridad en la autoridad podría obstaculizar los avances.
En respuesta, Ahern declaró que, aunque la CCC se siente aliviada al saber que Shapiro no encontró pruebas de fraude, no está totalmente de acuerdo con sus interpretaciones jurídicas sobre las tasas adeudadas. Hizo hincapié en la importancia de ofrecer al público una explicación clara sobre los supuestos $1,2 millones de tasas de licencias provisionales no cobradas.