Una operación relacionada con el mercado negro de marihuana en Oklahoma ha dado lugar a la condena de diez individuos que, en conjunto, cumplirán 38 años de prisión en una cárcel federal. El Departamento de Justicia de Estados Unidos anunció que las sentencias forman parte de una amplia investigación sobre una organización de tráfico de drogas (DTO) implicada en el cultivo y la distribución ilegal de cannabis.
La investigación, que duró cuatro años, concluyó con la condena de Naiqing Lin, ciudadano chino de 37 años residente en Nueva York, a 37 meses de prisión. Lin fue declarada culpable de conspirar para poseer y distribuir más de 1.000 kilogramos de marihuana y 1.000 plantas de marihuana. El caso pone de relieve las operaciones de una DTO que se trasladó de Michigan a Oklahoma para eludir la acción de la ley.
Desde enero de 2019 hasta mayo de 2023, los coacusados Fei Xie, de 36 años, y Naigang Lin, de 38, encabezaron las actividades de la DTO. Inicialmente con sede en Michigan, el grupo cultivó y distribuyó marihuana ilegalmente en todo Estados Unidos. Tras enfrentarse a problemas policiales en Michigan, la DTO se trasladó a Ada, Oklahoma, donde estableció una operación de cultivo ilegal de marihuana.
La DTO utilizaba una red de escondites en Oklahoma City para almacenar grandes cantidades de marihuana antes de enviarla fuera del estado. Durante la investigación, las autoridades se incautaron de aproximadamente 1.500 kilos de marihuana, unas 5.000 plantas de marihuana, cerca de $410.000 en efectivo y 10 propiedades valoradas en más de $4,6 millones. También confiscaron 10 vehículos relacionados con la operación.
Naigang Lin y Fei Xie fueron condenados cada uno a 120 meses de prisión federal por su participación en la conspiración. Otros acusados, como Naiyang Lin, Li Jin Yang y varios más, fueron condenados a penas de entre cuatro y 60 meses, dependiendo de su participación.
El juez de distrito Joe Heaton hizo hincapié en la gravedad de las operaciones de la DTO, afirmando que esta organización delictiva se aprovechaba de Oklahoma para expandir sus actividades en el mercado negro de la marihuana y de blanqueo de capitales por todo el país. El fiscal federal Robert J. Troester destacó los esfuerzos coordinados de los organismos encargados de la aplicación de la ley, entre ellos Homeland Security Investigations (HSI), para desmantelar la DTO y perseguir a quienes están detrás de tales actividades ilícitas.
En la investigación participaron varios organismos federales, entre ellos la Administración para el Control de Drogas (DEA) y el Servicio de Impuestos Internos-Investigaciones Criminales (IRS), en el marco de la iniciativa del Grupo Especial de Lucha contra la Droga y el Crimen Organizado (OCDETF), cuyo objetivo es perseguir a los narcotraficantes y blanqueadores de dinero de alto nivel. Los ayudantes del fiscal desempeñaron un papel fundamental en el enjuiciamiento de este caso, que pone de relieve los retos a los que se enfrentan las autoridades a la hora de combatir las operaciones ilegales relacionadas con las drogas y garantizar la rendición de cuentas de los implicados.
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