En Nebraska ha fracasado un intento legislativo tardío de proteger a los profesionales sanitarios que recomiendan cannabis medicinal. El intento se produjo durante la sesión del miércoles, tras el fracaso de un proyecto de ley más amplio de regulación del cannabis medicinal. El senador estatal John Cavanaugh, de Omaha, propuso una enmienda al proyecto de ley 376, que pretende reducir los requisitos de información en el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Nebraska.
Cavanaugh caracterizó su enmienda como una salvaguarda necesaria para los médicos, argumentando que proporcionaría un apoyo "pequeño pero significativo" a las familias que abogan por el acceso al cannabis medicinal. Esto se produce después de la votación del día anterior sobre el proyecto de ley 677, que pretendía establecer un marco de cannabis medicinal, fue derrotado por un estrecho margen con un resultado de 23-22, faltando los votos necesarios para superar un filibustero.
Según Cavanaugh, la falta de recomendaciones médicas ha obstaculizado el acceso de los pacientes al cannabis medicinal, a pesar de que los votantes aprobaron su uso para diversas afecciones médicas en más de 70% en una votación celebrada en noviembre. Actualmente, los pacientes de Nebraska pueden poseer hasta cinco onzas de cannabis medicinal con la recomendación de un médico, pero el estado aún no ha concedido licencias a los dispensarios, lo que limita el acceso.
La enmienda de Cavanaugh pretendía evitar cualquier repercusión legal para los profesionales sanitarios que recomendaran cannabis a los pacientes. Sin embargo, el fiscal general de Nebraska, Mike Hilgers, ha indicado que podría investigar a los médicos que emitan tales recomendaciones.
La oposición a la enmienda provino de varios senadores, entre ellos el senador estatal Bob Andersen, quien argumentó que la enmienda no era relevante para el proyecto de ley existente. El presidente del Senado, John Arch, apoyó esta opinión, y una moción para anular la decisión de Arch fue derrotada, obteniendo una votación de 15-30, siendo necesarios 24 votos para avanzar.
Los críticos, entre ellos el senador estatal Brian Hardin, tacharon la enmienda de "truco de salón barato" que podría poner en peligro el proyecto de ley en su conjunto. A pesar de que algunos senadores expresaron su apoyo a la propuesta de Cavanaugh, el momento de su presentación suscitó preocupación. La senadora estatal Margo Juárez señaló que las enmiendas introducidas tarde en las sesiones legislativas suelen enfrentarse al escepticismo.
La senadora estatal Megan Hunt defendió la pertinencia de la enmienda, argumentando que los procedimientos legislativos permiten a menudo interpretaciones amplias de la "germanidad". Sin embargo, otros sostuvieron que el carácter de última hora de la propuesta era inadecuado y pidieron más deliberación.
El alegato final de Cavanaugh hizo hincapié en el imperativo moral de que los senadores actúen en interés de las familias que buscan tratamiento con cannabis. Afirmó que la legislatura debe abordar estas cuestiones pronto, especialmente a la luz de los próximos plazos para la concesión de licencias de dispensarios.
El resultado de esta sesión legislativa pone de relieve los retos que sigue habiendo en Nebraska en relación con el acceso al cannabis medicinal y el entorno normativo que lo rodea. Los defensores de la reforma del cannabis planean continuar sus esfuerzos en futuras sesiones, con el objetivo de asegurar un marco que permita a los pacientes acceder a la medicina que necesitan.