La Comisión de Drogas de Londres ha publicado un informe en el que destaca 11 posibles efectos secundarios del consumo de cannabis, al tiempo que aboga por una despenalización parcial en el Reino Unido. El alcalde de Londres, Sadiq Khan, apoya esta recomendación, alineándose con las conclusiones de la Comisión que pretenden regular el cannabis de forma más eficaz.
El informe detalla diversos riesgos asociados al consumo de cannabis. Entre los efectos secundarios señalados se encuentran: 1. Deterioro de la función cognitiva, que puede dificultar la toma de decisiones y la memoria. 2. Aumento del ritmo cardíaco, lo que supone riesgos para las personas con afecciones cardíacas preexistentes. 3. Ansiedad y paranoia, sobre todo en usuarios inexpertos o que consumen productos con alto contenido en THC. 4. Problemas respiratorios derivados del tabaquismo, incluida la bronquitis crónica. 5. Dependencia y síntomas de abstinencia en consumidores habituales. 6. Deterioro de las habilidades motoras, lo que hace temer que se conduzca bajo los efectos del tabaco. 7. Efectos negativos sobre la salud mental, como la exacerbación de los síntomas de la depresión. 8. Interacción con otros medicamentos, dando lugar a complicaciones de salud imprevistas. 9. Reducción del rendimiento académico entre los adolescentes que consumen cannabis regularmente. 10. Efectos en el embarazo, incluyendo bajo peso al nacer y problemas de desarrollo en los bebés. 11. 11. Posibilidad de síndrome de hiperémesis cannabinoide, una enfermedad que provoca náuseas y vómitos graves.
Además de identificar estos riesgos, el informe ofrece 42 recomendaciones encaminadas a crear un marco más seguro para el consumo de cannabis. Entre ellas se incluyen medidas para educar al público sobre el consumo seguro, establecer límites de edad estrictos para la compra y mejorar el apoyo a las personas que se enfrentan a problemas de adicción.
El impulso de Khan a la despenalización parcial refleja una tendencia creciente entre diversos municipios y países a reconsiderar las leyes sobre el cannabis. Al abogar por un enfoque más regulado, pretende reducir el estigma y fomentar el consumo responsable, al tiempo que se centra en la salud y la seguridad públicas.
A medida que cambian las actitudes hacia el cannabis, el informe constituye un valioso recurso para los responsables políticos. Subraya la necesidad de una legislación equilibrada que aborde tanto los riesgos asociados al cannabis como los beneficios potenciales de un acceso regulado.